Transformadores de amaranto impulsan la economía de sus comunidades en la Ciudad de México

Publicado el 29 Abril 2018
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Con la finalidad de conocer sus necesidades e impulsar su desarrollo se realizó un recorrido con habitantes de Xochimilco que se dedican a la transformación del amaranto.

Durante la visita autoridades de la Secretaria de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades, SEDEREC, pudieron constatar el avance que han tenido los proyectos y como han evolucionado a lo largo de los años, contribuyendo a la economía familiar y el bienestar de la comunidad.

Edith Santana Cabrera, desde hace más de 20 años empezó como transformadora del amaranto en Santa Cruz, Acalpixtla, ella es fundadora de la cooperativa de mujeres productoras La Vaisa del Choco Amaranto, junto con sus hijas comercializan dulces de este cereal combinado con otros granos como la chia, linaza, ajonjoli y avena incrementando el valor nutricional de su producto final.

Relató que sus productos no contienen azúcar, en vez de eso utilizan miel de origen natural (de abeja) y melaza de piloncillo para compactarlo, con la finalidad de no perjudicar la salud del consumidor.

“Nuestros dulces los pueden encontrar en tiendas naturistas, exposiciones de alimentos y en algunas cafeterías, sin embargo, el siguiente paso que queremos es empezar a exportar para que en otros países también conozcan lo que hacemos en México”, destacó la productora.

Otro productor de la zona, es Jiovanni Hernández, quien se dedica a la elaboración artesanal de una botana enriquecida con amaranto; actualmente, su fábrica AmaraMiel da empleo a 52 personas.

Dos máquinas para cortar y freír las botanas del estilo de churritos; una mezcladora de masa, así como una empaquetadora trabajan en su taller ubicado en el pueblo de Santiago Tuyehualco, en Xochimilco.

“Trabajamos de una manera artesanal, actualmente generamos de dos a dos y medio toneladas diarias; sin embargo, tenemos la necesidad de construir una nave industrial para aumentar la elaboración de nuestros productos”, señaló Jiovanni.

Al final del recorrido ambos productores coincidieron que este tipo de acercamientos permite que sean escuchadas sus inquietudes y metas a corto, mediano y largo plazo como la exportación, comercialización y expansión para consolidar su proyecto productivo.

Además destacaron que el amaranto está clasificado como un cereal básico en la dieta mexicana, y posee nutrientes que puede sustituir perfectamente la comida chatarra.